Iniciar un proyecto nuevo en la vida, implica tomar múltiples decisiones, cada una de estas nos alejaran o nos acercaran a la meta deseada. Solo con el paso del tiempo, sabremos si las decisiones que tomemos serán acertadas.
Tomaremos decisiones, al elegir una empresa en la que laborar, o si dejar el trabajo en el que nos encontremos; tomaremos decisiones, al elegir una especialización, por que buscamos crecer profesionalmente y seguir nuestra pasión. Así, al crecer en el ámbito profesional, conoceremos nuevos círculos sociales, en los que pronto, se preguntarán si estamos titulados, o tenemos una especialidad, o magíster, cualquiera de estas palabras que nos inquietarán y querremos resolver con avidez.
Una vez planteada la duda, empezará el recorrido por resolver lo inmediato: el título, iniciando así una maravillosa travesía, que tendrá emoción, drama, suspenso y hasta acción. Lo siguiente en pensar, es ¿Con quién pasaré esta travesía? O acaso, ¿será mejor hacerlo solo? Apenas acabamos de decidir iniciar con la tesis y ya tenemos que tomar otra decisión. Para esto, déjame darte unos consejos, que te puedan orientar a decidir entre hacerlo solo o con un compañero de tesis.
Primero, recuerda siempre cuál es la meta: Titularse, a lo largo del camino de la investigación, surgirán nuevos intereses, nuevos proyectos, nuevas oportunidades; sin embargo, la meta sigue siendo titularse, por eso, recomiendo que, de elegir un compañero, sea alguien que te anime y puedas animar, a siempre continuar adelante y no perder de vista la meta.
Segundo, es importante la responsabilidad y el compañerismo, en esta aventura “tesística” van a pasar varios meses de arduo trabajo de investigación, y es normal que, entre dos, se repartan las actividades, confiando en la responsabilidad del compañero, que cumplirá con su parte, para el día acordado y que su desarrollo de calidad en lo avanzado, sin embargo, si no lo llega a cumplir, y deben continuar con el avance, finalmente tendrás que realizar su parte también, ¿Cuántas veces? Las que sean necesarias, tu meta es titularte y tu decisión es hacerlo solo con compañero, y este es un riesgo que se va a asumir.
Tercero, reconozcamos nuestras habilidades y nuestras falencias, ya que llegaremos a la sustentación con todo, defendiendo con nuestra mejor versión de orador, el trabajo de investigación de tanto tiempo y esfuerzo. Más con un compañero, que diferentes habilidades y diferentes falencias, puede complementar la defensa que realizaran y juntos hacer un excelente equipo, que respondan todas las preguntas de manera acertada y con seguridad.
Es claro que, al decidir iniciar con la tesis, se continuará decidiendo, sobre realizarlo con un compañero o solo. Para ambas situaciones encontrarás ventajas y desventajas, evaluaras opciones, de con quienes podrías realizar la investigación, revalorando viejas y nuevas amistades que puedan compartir contigo el interés y deseo de crecimiento profesional, iniciando con la titulación.
Aún con todas las técnicas de toma de decisiones que puedas aplicar, o cualquier test que vayas a desarrollar para saber si ese compañero es el que complementará tus competencias, la decisión es finalmente tuya, y las consecuencias de esa decisión también.
La tesis no solo nos prepara profesionalmente para defender una temática en particular, si no que nos confrontará con nuestras debilidades, nos llevará a tomar una serie de decisiones, con consecuencias a lo largo del proceso, y sobre todo, nos llevará a reconocernos capaces de lograrlo y desarrollarnos personalmente; tener un logro con honor, marcará un hito en nuestra vida.
Comments